No podría nadie imaginar, la tremenda alegría que sentimos cuando hoy, tras un duro día de trabajo, revisaba el correo electrónico, justo en el momento en que entraban Paula y Lera por la puerta... No he podido contener las lágrimas por la ilusión...y aún ahora empañan mi vista mientras escribo. Nuestro proceso de adopción, como tantos otros, fue como quizás sepáis, muy duro...y aún así, siempre confiamos en que al final del camino, nos estaría esperando el tesoro más maravilloso del mundo: y así fue...en forma de nuestra queridísima hija Lera. Parte de aquella tensión, dolor y tristeza que acompañaron ese proceso, quedó dentro de nosotros, sin posibilidad de exteriorizarlo e incluso en muchas ocasiones, por faltar con quien: la vida fue y es aún demasiado rápida desde que conocimos a nuestra hija...y no nos ha permitido aún detenernos a meditar y a comprobar la magnitud de nuestra unión; pero en momentos como este, ves pasar por la cabeza y velozmente cada instante vivido e incluso recordando temores, logros y detalles que parecían olvidados. Siempre dije que hay que sembrar y tratar al mismo tiempo de ser de ayuda para los demás, para obtener la mejor cosecha e incluso sentirse satisfecho haciendo todo lo que está a tu alcance en cada aspecto de la vida...pero la recompensa en este caso, es sin duda, comparable a todo el esfuerzo realizado hasta unirnos en familia. Lejos de hablar o pensar mal acerca de quién dio la vida a Lera (a quien por cierto, no podríamos nunca juzgar sin conocer cada detalle de su vida); siempre deseamos lo mejor para ella, tratando de agradecerle el haberla permitido ver La Luz...haciéndole llegar nuestro sentir y todo nuestro cariño, pudiéndole transmitir a Lera ese respeto y cariño hacia alguien tan importante en su vida y en nuestra propia historia familiar, como fue la mujer que la llevó en su vientre: para que Lera siempre pueda hablar de ella como aquella buena mujer que la trajo al mundo, sabiendo que no podría hacerse cargo de ella...y que la ofreció a las autoridades para que encontrasen una familia (la mejor como ella misma dice) que pudiera darle un futuro lleno de oportunidades y todo aquello que más necesitaba...como el Amor y los Cuidados de unos padres. Hoy sin duda, nos acordamos y abrazamos en nuestra imaginación a aquella mujer a la que hoy, hemos podido poner rostro y que en su momento, Lera podrá también observar, al tiempo que comprender el significado de aquel gesto que la honra...y que estamos seguro que agradecerá ahora más que nunca tras tener noticias de aquella pequeña a quien "ella misma" llamó Lera. Seguíamos esperando una ampliación de la información; así como las respuestas a tantas preguntas que le hacíamos en nuestra carta: pero indudablemente, hoy podemos también sentir el alivio y la satisfacción de haber alegrado y esperamos llenado de felicidad a esa mujer con tanta necesidad y a quien tanto le debemos, sin ella poder calcular cuánto. Estamos convencidos de que esa carta tan íntima y sentimental, calaría muy profundamente en su corazón (que era nuestro objetivo), al tiempo que la acompañará toda su vida sabiendo de primera mano y observando en primera persona, cómo aquella pequeña crece feliz, sabiendo que ella existe y conservando en su corazón y en su mente, sus orígenes y el amor (inculcado desde el primer día por sus papás, nosotros) hacia todas y cada una de las personas y lugares que marcaron su vida hasta aquel día en que pudimos emprender juntos, el largo camino a su hogar...unidos para siempre en familia.
Cuando iniciamos la búsqueda de orígenes de Lera, confiábamos y mostrábamos nuestro aspecto y visión más positivos acerca de los resultados que podríamos obtener; tratando de imaginar su historia aún desconocida y todo lo que rodeó su nacimiento...pero hoy, pendientes aún de dichas respuestas, podemos mostrar nuestra felicidad por los resultados obtenidos y por saber que aún estamos a tiempo de hacer algo más por nuestra hija...y también por esa mujer de aspecto humilde y necesitada como es su madre biológica. Comienza una nueva etapa que no sabemos qué nos deparará; pero que nos abre la puerta a infinidad de opciones en el futuro...
Recibimos por tanto hoy, en un día tan especial y simbólico como es el día de Todos Los Santos, una noticia e información que hace honor y nos permite tener aún más presente a aquel abuelito que con tanto amor la aguardaba y que hoy a buen seguro y de algún modo, tendrá conocimiento en su descanso (en el cielo, como todos soñamos); así como el recuerdo de alguien tan importante y que también reposa en el Camposanto de Vladivostok, como lo es nuestro querido y siempre recordado amigo y representante Iván: ni más ni menos que quien nos permitió conocer a Lera hasta unirnos en familia; incluso llevándonos a visitarla a pesar de su grave enfermedad (recordar que falleció tristemente mes y medio después de llegar Lera a casa...D.E.P.).
Aún sabiendo lo que podríamos encontrar al realizar la búsqueda; sentimos al mismo tiempo, una profunda tristeza por la historia de esta mujer, aún sin conocer los motivos (que los sabremos cuando leamos las respuestas) que la llevaron a dejar a cargo de las autoridades a esa niña que llevó en su vientre (como dije, trato de evitar la palabra que tan dura me resulta: "abandonar"). Su gesto, nos permitió cumplir el deseo de ser padres al tiempo que le daba a Lera la oportunidad de vivir; sin conocer la magnitud de su acto...y hoy nos muestra también la imagen de alguien que necesita ayuda y nos permite la posibilidad (ojalá) de ofrecérsela. Qué pensará ahora de su gesto? Cuánto pensará ahora en Lera y en su familia? Qué sentimientos le invadirán la mente? En algún momento habría recordado a esa pequeña? Le reconfortarán las noticias acerca de ella y el pensar en aquel gesto? Se sentirá feliz de saber que Lera sí lo es? Qué sentirá acerca de nuestro interés y nuestro agradecimiento hacia ella? Qué sentirá sabiendo que esa opinión positiva es la que trasladamos a Lera?
DE MADRUGADA, tras haber escrito este texto; y tratando aún de asimilar las noticias, llegó el resto del informe...
Pues también hoy, tenemos la respuesta a todas estas preguntas (y a muchas más: aquellas que le hicimos y que aceptó a responder...y que leeremos cuando tengamos el valor y encontremos el momento de tranquilidad necesario)...y no podían ser más favorables, pudiendo observar su emoción y agradecimiento por ofrecerle información acerca de Lera y por mostrarle unas imágenes suyas donde puede observar cómo crece feliz y protegida por sus papás...
En la vida, siempre tratamos (al menos nosotros) de añadir de forma positiva tanto personas como circunstancias o acontecimientos que surgen a lo largo de ella: nos rodeamos de quienes creemos requieren o merecen apoyo, cariño o simpatía...trasladamos nuestros sentimientos y los compartimos con todos aquellos que se acercan a nuestra vida con buenas intenciones o incluso interés...y de todo y todos se aprende, aceptando los aspectos y enseñanzas más importantes.
Simplemente con lo que ya hemos recibido, compensaría y mucho, el desembolso económico realizado para emprender la búsqueda de orígenes...y los resultados, son mucho más importantes de lo que podíamos haber imaginado: un éxito rotundo (porque era lo que buscábamos) Confianza? Siempre la tuvimos, pero las dudas acerca del interés que podría suscitar, nos hacían confiar en el texto, sentimiento y sentido de esa carta de presentación enviada con todo nuestro cariño y buenas intenciones a una madre biológica de quién desconocíamos absolutamente todo.
Esas imágenes, vídeos y respuestas, que hoy recibíamos, nos acompañarán durante toda la vida: y a Lera le harán la vida más fácil, conociendo datos y detalles que le puedan permitir salir reforzada de una situación de adversidad que le vino nada más llegar al mundo (y quizás antes). Pero a su vez, nos permitirán tener a esta mujer presente en los momentos más importantes de nuestra vida familiar; como de hecho, siempre hicimos hasta ahora. Cada fecha marcada en nuestro calendario, lo era de agradecimiento hacia ella: y desde hoy, podremos poner rostro a su Generosidad y Bondad al traerla a la vida. Observarla mientras mira las fotos de Lera vestida con trajes y disfraces típicos rusos (a pesar de la distancia y las diferencias sociales y culturales), no tienen desperdicio...y esperamos y deseamos le generen la paz y tranquilidad que parece mostrar en dichas imágenes.
El informe pues, no podía ser más positivo: un completo éxito... Y por eso mismo, teníamos la obligación de contarlo y compartirlo, para que muchos otros, pequeños y sus familias, puedan animarse o incluso tener Esperanza de conocer o saber más acerca del origen y la historia de sus hijos adoptados. También nos acordamos enormemente de quienes no obtienen esos resultados en la búsqueda...porque no siempre es así: pero ellos también saben, y no nos cansaremos de repetirlo, que nunca hay que rendirse, porque la Perseverancia, lleva al éxito...y si no es así, al menos quedará siempre la certeza y la seguridad de que se hizo todo lo posible por conseguirlo: y eso, también es muy importante para nuestros hijos...su confianza y seguridad, al tiempo que puedan sentirse orgullosos de los valores y el ejemplo de sus papás...
никогда не сдавайся... (Nunca te rindas).