miércoles, 11 de marzo de 2015

Qué cambios llegarán tras la Ratificación del Convenio de Adopciones de menores con España?

     Ésta semana, comenzaba con la Firma del Presidente ruso Vladimir Putin del Convenio de Adopciones con España, tras su Ratificación en la Duma y el Senado rusos. Ahora, tras su publicación en el correspondiente boletín oficial ruso, no debería haber trabas para la reanudación de los procesos aún paralizados en varias regiones rusas...y para volver a la normalidad tan necesaria para los menores en cuanto a los procesos de adopción.
     Como afirmaba el otro día, la Ratificación del convenio, es un Motivo de Esperanza, que debe servir para volvernos a ilusionar... Pensando que todos aquellos niños que necesitan una familia, pueden encontrarla en una de las muchas que a pesar de todos los obstáculos, siguen buscándolos. A estas alturas, no podemos hacer cábalas acerca de los posibles cambios que puedan llegar, pero está claro que únicamente podemos desear que todo vuelva a la normalidad y los procesos de adopción, que en definitiva es la búsqueda de la Felicidad para los menores y las familias,  se puedan vivir y sentir como la maravillosa historia de amor y encuentro que son... Es triste que muchas familias tengan miedo de ilusionarse o ilusionar al resto de la familia, por si algo se tuerce; porque al fin y al cabo, es algo para lo que hay que preparar a todos los que te rodean y van a ser parte importante en la vida de tu hij@... es la manera de hacérselo más fácil a su llegada y de hacer a todos partícipes; porque empezarán a quererlo mucho antes de conocerlo. Aún así, hay quienes, en concreto determinados jueces rusos, están haciendo (aún tras la Ratificación) vivir una auténtica pesadilla a muchas familias que ya conocieron a quienes consideran sus hijos...en concreto, en la región con mas expedientes de familias españolas registradas. Y con ello, parecen esperar "galones", para acceder quizás a algún puesto que ansían...y haciendo un daño terrible a los propios menores. Creo que en vez de galones, deberían recibir algún castigo o correctivo por no mirar por el interés de los pequeños y hacerlo en el suyo propio, pero ya sabemos como desgraciadamente funciona todo en el mundo en que vivimos...
     Nuestra felicidad, es similar a la de otros muchos: se encuentra empañada por la situación que están viviendo muchas de las familias con las que tanto llevamos compartido...y no podrá ser plena hasta que todas ellas consigan traer a sus pequeños a casa y podamos volver a disfrutar compartiendo cada historia. Sabemos las dificultades que conlleva la adopción internacional; y por ello, la llegada de cada pequeño nos llena de emoción...es un motivo de alegría difícil de expresar; porque se siente como propio. Todos sabemos y ahora más, que la llegada de cada menor a su familia, es un Milagro. A veces, se comparte tanto, que por eso lo llamamos la Gran Familia de Adopción, porque todos estamos dispuestos a ayudar en lo posible a los demás... Ahora, muchas familias tienen miedo a compartir su situación, por la incertidumbre, pero estamos confiados de que algún día debe salir el sol para esos niños que tanto lo necesitan... Es muy desalentador, que un proceso de adopción no pueda vivirse como debería, disfrutando de cada paso; puesto que no deja de ser sino la llegada a casa de un hijo: pero además, lo es de quienes ya han tenido un bagaje en la vida, que también les ha impedido ser niños...
     Hay que recordar lo que mostraban hace poco los medios de comunicación: hay cerca de 35.000 familias en España con idoneidad para afrontar una adopción, pero apenas existen opciones donde dirigir ese ofrecimiento... Y tampoco hay que mirar muy lejos, porque se debe mejorar la adopción nacional y llegar ya esa nueva ley de Protección de Infancia que modifique el sistema de adopción existente que si a alguien no beneficia, es precisamente a quienes más lo necesitan ... Los menores.

     Ahora mismo, también sentimos el hormigueo en el estómago, por familias que conocemos que vuelven a ilusionarse...que buscan, como siempre tratamos de hacer, algo a lo que agarrarse para seguir luchando por quienes consideran sus hijos; y por algunas también cercanas, que emprenden estos días, el viaje que hicimos nosotros, al mismo lugar donde conocimos a nuestra hija y "casi" con las mismas personas. Posiblemente lo más maravilloso para nosotros, sería poder acompañarlos en ese viaje, para revivir con toda la alegría, lo que hace meses vivimos rodeados de temores... Ya estamos deseando volver, e incluso comenzar una nueva adopción, que por supuesto, a pesar de todo, no tendríamos ninguna duda en repetir con los mismos intermediarios (aunque bien es sabido que desgraciadamente, no habría oportunidad de volverlo a compartir con nuestro querido amigo Iván) y por supuesto, en la región que nos enamoró y nos robó el corazón para siempre. La verdad es que desgasta mucho el proceso, y el aspecto económico no lo es menos: se resiente mucho el bolsillo y la situación en estos momentos no es buena, pero cualquier ingreso extra o inesperado, no hay duda en qué lo invertiríamos!!! Bueno, se aceptan donativos!! (Quizás, a estas alturas, alguien no sepa qué hacer con el dinero Jajaja...). Sin duda, las prioridades en la vida cambian y lo que quizás más nos podría llenar ahora, es poder facilitar el encuentro entre los niños y las familias; aunque nos sería muy difícil porque sufriríamos cada caso como propio... Ojalá naciéramos con ciertos conocimientos, porque sin duda, me habría preparado antes para ello. 
     Como ya hemos comentado, allí dejamos a personas que queremos mucho, porque con ellos hemos compartido (y seguiremos haciéndolo), algunos de los momentos más hermosos de nuestra vida...y también, a muchos menores que con su recuerdo, nos permiten desear que muchas familias puedan viajar a conocerlos. Por cierto, la única española en VLADIVOSTOK, es un ángel que conocimos en este último viaje...una religiosa que como tantos otros, realiza un trabajo maravilloso ayudando a los menores de familias desfavorecidas: lo cual no deja de chocar en una cultura en la que no se puede comprender que alguien pueda ofrecer algo sin esperar nada a cambio... Aunque no saben, que estas personas, lo encuentran en el simple hecho de hacer el bien a los demás... Y lo mejor y más importante, es que sirve de ejemplo para que otros de allí, puedan continuar lo que ella ha comenzado. 


2 comentarios:

  1. Como siempre Luismi no os puedo leer sin emocionarme y sentir esas palabras llenas de significado para nosotros. Un abrazo

    ResponderEliminar
  2. Como siempre Luismi no os puedo leer sin emocionarme y sentir esas palabras llenas de significado para nosotros. Un abrazo

    ResponderEliminar

Déjanos aquí tu comentario, que será publicado con todo nuestro agradecimiento. Esperamos ser de ayuda.