Siempre he dicho que mi trabajo es duro y a veces, muy esclavo; pero que te permite conocer gente maravillosa, además de aprender mucho acerca de la psicología humana. Hoy hemos tenido una larga charla con alguno de ellos, como es Svetlana (Lucía en español). Hemos hablado un buen rato sobre su país (Rusia) y los sentimientos que nos provoca ya a nosotros; que son directamente proporcionales a su amor por España...qué bonito es cuando se pueden expresar los sentimientos y eres correspondido: ahí se ve la grandeza humana, mucho más que en el día a día. Nos ha comentado también la posibilidad y la ayuda que ofrece la Embajada rusa para que los niños adoptados allí, puedan mantener ó conocer sus costumbres, sus raíces, el idioma...
Luego, por curiosidad: hemos empezado a hablar de nombres de niños y hemos descubierto los diminutivos que son tan utilizados allí...y me ha hechizado un nombre: Misha!!! Sí, el mismo que me hacía disfrutar cuando era niño y el que fué mascota de las Olimpiadas de Moscú '80...
Misha (Miguelito), es un apodo precioso para llamar a un niño, aunque el nombre es Mijail (o Mikhail): el equivalente de mi nombre Miguel...nunca pensé en ponerle mi nombre al primero de mis hijos si era niño, porque creía tener bien claro cuál iba a ser; pero me ha llenado el corazón de alegría y además su origen va a ser Rusia...mi osito favorito y tantos recuerdos bonitos de la infancia.
Desde hoy, tengo un nombre que me evoca sólo buenos sentimientos y ternura...quién no recuerda al tierno osito de Moscú 80? y la serie de dibujos?
El nombre si fuera niña, no ofrece dudas y ahí no hay más opciones: aunque hay nombres reálmente bonitos en Rusia (y los diminutivos con sus significados, son aún más auténticos)...sería Paula.
Quizás haya que irse planteando un nombre compuesto como alternativa: formado por un nombre en castellano y otro originario ruso...creo que sería lo ideal.
Este blog es más personal. Es un Diario: en él, iremos contando lo que es el día a día de nuestra adopción: desde el por qué lo decidimos, pasando por todo el proceso de información, cursos, trámites y todas nuestras emociones, vivencias...Es una historia que no terminará el día que logremos tener a nuestro hijo(-a) en casa, sino que contará también la adaptación y todo lo que venga después...La Historia de una Adopción en Rusia.
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