lunes, 6 de octubre de 2014

QUE REPRESENTAN UN BESO Y UN ABRAZO?... No hay mayor pobreza, que no recibir Amor.

     Hoy, recuerdo un hecho que me conmueve, enternece y entristece: la diferencia que existe entre el significado de un beso para quien lo conoce y casi necesita para vivir en paz; y lo que representa para quien nunca ha tenido la fortuna de saberlo... Parece increíble pensar en ello; pero esa pregunta, me la hago muchos días, e incluso, me vino a la cabeza el día que presenciábamos el Debate sobre la Ratificación del Convenio de Adopciones con Rusia: sentía el corazón herido cada frase en contra de él, que lanzaban los diputados que se oponían a su aprobación...recordaba a nuestra pequeña, que no conocía lo que era un simple y maravilloso beso, porque nunca lo había sentido. Parece que quien no ha recibido un beso nunca, no puede quizás haber podido soñar con algo más allá...con algo parecido a la Felicidad. Ellos, simplemente conocen la conformidad y viven complacidos con lo poco que les rodea y tienen a su alcance...pero viven sin la esencia y lo más fundamental en la vida, que son el cariño y el Amor. Un beso o un abrazo!!! Dios mío!!! Son cosas que aún hoy, a mis 40 años, son fundamentales en cualquier momento; tanto de alegría como de tristeza...y ella, nuestra pequeña; al igual que muchos de esos menores, no conocen su significado porque nunca han podido sentirlo...
     Recuerdo que sus únicos signos de disconformidad, correspondían a esos besos y esos abrazos que con tanta ilusión y alegría le dábamos...y a pesar de sugerir ese pequeño quejido que emitía en esos momentos, le dábamos el carácter de normalidad que requería, para lograr que lo sintiera como algo bueno y merecedor de disfrutarlo. Así, conseguimos que el abrazo, que era lo más parecido a algo que había sentido a través de los brazos que tantas y tantas veces la habían levantado y recogido, simplemente para trasladar o emplazar en otro lugar; fuera convirtiéndose en algo más agradable de lo que siempre había disfrutado... Logramos que todos los días, fuera directamente hacia nosotros (con su difícil y poco consistente caminar) en busca de unos brazos que la aguardaban abiertos dispuestos a rodearla con todo su halo de amor y con la Esperanza de transmitirle todo lo que para nosotros representa un simple abrazo. Comprendió que existía algo en esos abrazos, que le daban una Seguridad que quizás nunca antes había experimentado...y que le gustaba casi tanto como a nosotros. Reconozco, que era un instante mágico, poder observarla corriendo hacia mi...mientras yo trataba de aguantar las lágrimas de emoción y de alegría (las mismas que asoman pidiendo permiso ahora mismo al recordarlo...), a través de unas sonrisas sensibles que me permitían mantener la serenidad de un momento tan hermoso. Recuerdo el rostro de Paula, tan emocionado, cada vez que yo la sostenía entre los brazos...y que con toda seguridad, ella también sentía al observarme a mí, mientras eran sus brazos los que cobijaban a nuestra hija. "Si todo va bien", pronto podremos volver a sentirlo y podremos ofrecérselo para siempre...pero hasta que no volvamos a tenerla a nuestro alcance, no lograremos creer que es real; y por eso, se hace tan difícil cualquier espera.
     Recuerdo, y es el reto más maravilloso (porque será muy grato practicar), que no se acostumbró a los besos: quizás por la humedad de unos labios que se acercaban amenazantes a sus mejillas, o quizás por no confiar en que hubiera alguien dispuesto a estar tan cerca de su débil y endeble persona... Recuerdo, y deseo volver a sentir cuanto antes; la reacción de nuestra pequeña a esos besos: mezcla de desconfianza y sorpresa...pero que en los últimos momentos, veía como algo más normal, a pesar de no llegar a comprender su significado y los sueños presentes en cada uno de ellos.
     Sin duda, no puedo concebir una vida sin besos y abrazos; pero desgraciadamente, los más necesitados, siguen carentes de ellos...y quien no siente cariño y conoce al menos lo que es la felicidad; no puede tener Esperanza en ver mejorada su vida...porque lo desconoce todo. "No hay mayor pobreza, que no recibir Amor"... Y muy pronto, confiamos en poder hacerla sentir "Rica" y Dichosa; porque ese Amor, nunca le faltará a nuestro lado y al de quienes tanto la quieren ya a pesar de la distancia...y de no haber podido estrecharla en sus brazos. Sólo ruego, que cuanto antes, nos permitan ofrecérselo.

2 comentarios:

  1. ¡Qué gran verdad! Sin abrazos, sin besos, sin amor somos realmente huérfanos. No hay mayor pobreza que esa.
    Hola, soy nueva en estos temas pero he ido leyendo tu blog y me encanta. En nuestro caso aún estamos iniciando los trámites y sabemos que es un camino muuy largo, por eso estamos recopilando toda la información que podamos. Aunque las Ecais de Zaragoza, donde vivimos, nos están dejando más confusos que otra cosa ya que cada una da una información distinta. Si alguien pudiera contarnos sus experiencias le estaríamos muy agradecidos.
    Muchas gracias y felicidades de nuevo.
    María José

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    1. Perdonad por no haber respondido antes... os dejo mi mail para que os pongáis en contacto y poder daros algún consejo por si os pueden ser de ayuda... un saludo.
      lmmanrique@hotmail.com

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