martes, 28 de enero de 2014

No es justo, Hijo mío...

     Hijo mío: cuanto más tiempo pasa, más oportunidad hay de pensar...de intentar comprender: de recordar lo que fue y que ya debería ser habitual... ya, nos emociona cualquier comentario; y cada vez sentimos más incredulidad por ésta situación. Sólo nos podemos preguntar POR QUÉ? Algún día, en el futuro; podremos hablar de éstos momentos...porque no lo conseguiremos comprender nunca: porque, ni es justo, ni encuentro una causa para que pueda ser necesario...
     No es justo, Hijo mío: que no puedas disfrutar de un abrazo...pero tampoco lo es, que no puedas recibir un beso y todo el amor de quienes te queremos desde el mismo instante en que nos mostraron tu primera foto (aunque nuestros corazones, ya te sentían sin aún conocerte).
     No es justo, Hijo mío: que tras conocernos, no puedas sentirte especial como esos días...aunque lo serán todos los días, cuando al fin nos permitan estar juntos para siempre.
     No es justo, Hijo mío: que tengas que pasar un sólo día, sin poder ser un niño; sin poder jugar y sentir la libertad que un niño necesita para poder desarrollarse...aunque muy pronto conocerás mucho más de lo que nunca imaginaste, y serás libre para poder descubrir todo lo que te rodea; para saciar tu curiosidad.
     No es justo, Hijo mío: que tengas que renunciar a tener tus gustos o tus preferencias, porque la vida no te permite tener opciones...aunque a nuestro lado, tendrás oportunidad de elegir y llegar a Sentir.
     No es justo, Hijo mío: que ya tuvieras que sufrir por una forma de vida no planificada por quien te trajo al mundo y que aún ahora, tengas que pagar por algo por lo cuál no eres responsable... aunque ya conocemos la forma de hacerte comprender, que a pesar de no poder tener siempre lo que uno quiere o desea; también te puede enseñar a superar los obstáculos y aprender también de ellos.
     No es justo, Hijo mío: que no puedas tener tus propios sueños, porque tus recuerdos no existen; porque no has conocido nada fuera de la "casa de los sueños" que habitas, y donde por mucho que quieran, es muy limitado lo que poderte ofrecer... aunque la semana que pasamos juntos, pueda permitirte así, recordarnos mejor; por ser lo único distinto en tu vida...
     No es justo, Hijo mío: que no encuentres motivo para esbozar esa preciosa sonrisa...aunque constantemente pensemos en el remedio inmediato que supondrá nuestra presencia para conseguirlo.
     No es justo, Hijo mío: que a pesar de haber encontrado tu familia, no puedas estar ya con ella en tu hogar... aunque seguiremos luchando por conseguirlo cuanto antes.
     No es justo, Hijo mío: que la distancia te separe de quienes te sentimos tan cerca, a pesar de no alcanzar a abrazarte... aunque esa distancia, no será nada cuando podamos acudir en tu busca.
     No es justo, Hijo mío: que una barrera burocrática, te impida el estímulo y esa oportunidad que necesitas para tu desarrollo físico y emocional... aunque vamos aprendiendo con cada día que pasa, para poderlo hacer frente juntos.
     No es justo, Hijo mío: porque es inhumano...que ésta situación se siga prolongando en el tiempo un sólo día más... aunque muy pronto, podremos emprender el viaje de nuestra vida: el que nos lleve urgentemente a tu lado.
     No es justo, Hijo mío: que no sientan esa necesidad urgente que tenéis; que no os podáis sentir "visibles" para quienes toman las decisiones, mientras hay quienes desesperamos porque no podemos apartar nuestro pensamiento de vosotros... aunque visibles sois y seréis realmente siempre, para quienes debemos compartir el resto de la vida con vosotros; para quienes tenemos que ofreceros todo, hasta que os podáis sentir capaces de hacer y ser quienes vosotros realmente, queráis ser... porque no habrá ninguna limitación ni barrera que os impida ser quien y lo que queráis en la vida, si ello va a permitir conseguir el objetivo principal de obtener vuestra Felicidad...
     No es justo, Hijo mío: que te sientas sólo y triste, mientras nosotros pasamos las noches en vela por no poder tenerte a nuestro lado y cuidarte.. aunque eso sí te lo puedo Prometer: no te volverás a sentir NUNCA sólo cuando estés con nosotros; porque siempre estaremos contigo. Nosotros, te mostraremos el camino; y trataremos de ser tu mejor ejemplo...para que tú mismo puedas decidir tu propio futuro y Felicidad.

     No es justo, Hijo mío: pero sabes cuál será la mejor enseñanza a tanta Injusticia?... que al igual que cuando nos encontramos, fuimos felices; ésta situación nos permitirá superar la adversidad y apreciar en su verdadera magnitud ese tiempo perdido, al igual que nos ha permitido conocer realmente, que nuestro amor por tí, no tiene ni tendrá límite...
     Nada en ésta situación es justo, Hijo mío... porque es incomprensible: y aún así, aprenderás que somos afortunados... tú, nos tienes a nosotros; y si Dios quiere, será para siempre...al igual que nosotros esperamos tenerte a tí. Pero somos afortunados, porque seguirá habiendo millones de niños y millones de familias repartidas por el mundo, que desgraciadamente y causado muchas veces por la burocracia; nunca logren encontrarse. Y eso, Hijo mío... sí es también, realmente injusto.
     Te enseñaremos siempre a valorar lo que se tiene, porque nunca se tiene todo lo que se desea; pero tampoco todo el mundo tiene, lo que los demás quizás no aprecian...
     Te queremos, Hijo mío... y eso, sí te puedo decir con toda la seguridad del mundo, que es totalmente justo: y poderte ofrecer ese Amor, es totalmente necesario.


     

5 comentarios:

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  2. Comparto todo tu dolor. No es justo que tengamos que sentir todo esto por el simple hecho de querer "querer" a nuestros hijos, muchos porqués acumulados, pero ¿sabes, Luismi? Todo esto nos está haciendo tan débiles que al final nos hará los más fuertes. Es así. Y seremos los padres más entrenados del mundo en gestionar las situaciones, sean malas o buenas o regulares. Y seremos los padres más felices del mundo cuando nos sonrían por todo ese tiempo en el que nos hemos perdido sus sonrisas. La alegría es mayor cuando tarda, y cuando por fin podamos tocar con nuestras manos esos cuerpecitos deseosos de ser abrazados, cuando podamos correr detrás o delante, o mejor aún, al lado de esas pequeñas piernas con poco músculo pero muchas ganas de jugar. Es entonces cuando todo este dolor se convertirá en felicidad, y eso es mucha felicidad.

    Adelante, ánimo, ¿no os dais cuenta? tenemos que cumplir nuestros sueños para que ellos, nuestros príncipes, puedan cumplir los suyos y eso es precioso y motivador. Es duro pero ¿quién dijo que ser padres era fácil?

    La justicia, antes o después, llegará. Eso sí, ojalá sea "antes".
    Muchos abrazos para todos.

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  3. Claro que sí, nuestros sueños son los suyos, así que, esa motivación nos sostiene.
    Sin embargo es muy duro sentir el sufrimiento de un hijo, o ver cómo, por algo que le es totalmente ajeno, se ve privado de lo que le corresponde vivir como niño.
    De todas formas, estos niños que esperan, van a encontrarse con unos padres que, pueden estar seguro, les van a querer por encima de todo, y van a hacer lo posible y, casi lo imposible, por su felicidad. No en vano son "los hijos más deseados".
    ¡Mucho ánimo familias!. Cada día estamos más cerca

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  4. Muchas gracias por vuestras palabras. Estamos en un momento difícil, pero confiamos en que muy pronto, podamos empezar a mostrar a nuestros hijos, que sus vidas cambian para siempre y que lucharemos siempre por su felicidad: para que no vuelvan a sentir que nada les falta...sobre todo amor y cuidados. Un abrazo muy fuerte y mucho ánimo...estamos cerca de emprender el camino de nuevo...

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    1. Y estoy totalmente de acuerdo: todo el dolor acumulado, nos está permitiendo descubrir nuestros propios límites y capacidades...y nos serán muy válidos para enseñar y criar a nuestros hijos desde la fortaleza que hemos adquirido: y desde la capacidad de buscar soluciones a los problemas que se nos presenten en el futuro.

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