Se nos piden continuamente "Actos de Fe", en forma de Prudencia y Paciencia (se
puede tener más aún?); pero sin conseguir ninguna solución ni tan siquiera una
muestra de que existen avances en nuestro proceso... Es una situación
increíblemente cruel, que nos causa un terrible sentimiento de constante
tristeza. Tanto tratamos de encontrar luz en nuestro futuro, que cualquier
detalle queda en nuestro recuerdo... Y tan profundos son los sentimientos y
punzante dolor en el corazón, que muchos son los motivos para rechazar lo que
nos recuerde a alguna de las situaciones ya superadas...y es tal el
desconcierto, que de producirse en algún momento esa llamada que nos devuelva la
vida (ahora secuestrada y retenida por algo tan incomprensible por ser tal la
dependencia), nunca sonará en mi teléfono ese tono del himno de Rusia, que por
ser tan ansiado, ha llegado a ser aborrecido... Hoy, tras esperar que sonara (y no lo hizo),
como tantas otras veces; y después de indicarnos que podríamos obtener ya una
fecha de juicio (y con ello, volver para siempre junto a nuestra hija) por
tratarse del día en que los "últimos"(???) documentos requeridos eran presentados en el
juzgado (y puesto que es el día en que se producen las comparecencias en materia
de adopción de menores en Vladivostok)...era tal el desconsuelo, que sentía
helarse la sangre y no podía permitirme derramar una sóla lágrima, pensando en
la cantidad de mazazos recibidos ya durante estos últimos dos años; y en lo que
vamos augurando como unas Navidades totalmente opuestas a lo que imaginamos
desde que en el viaje de asignación, todo el mundo predijo nuestra vuelta a
juicio en dos meses... Pues bien, con más del doble de tiempo transcurrido; y
tras pasar todo este tiempo creyendo que cualquiera sería el día (por hacérnoslo
creer así desde ese primer día...), nos vamos haciendo a la idea de que tras ese
tiempo, aún no sabemos ni cuando será esa vuelta junto a la pequeña cuya
ausencia nos quita la vida. No quisimos transmitir a nadie la posibilidad de que
fuese hoy con casi total posibilidad, cuando recibiésemos esa fecha; porque como
tantas otras veces, no queríamos volver a transmitir noticias negativas...parece
que cuando existen probabilidades de que algo ocurra de forma positiva,
únicamente vemos cómo se hace realidad la escasa posibilidad de que no sea así.
Y como ya se está convirtiendo en costumbre, a pesar de creer en la posibilidad
de que algún día se produzca y nos haga desvivirnos por ella, siempre pensamos
que algo volverá a entrometerse en nuestro camino: y a pesar de esperar que hoy
se produjera la llamada, fuimos poniendo paños calientes antes de producirse la
herida...y pensábamos que el camino, podría jugarnos nuevamente una mala pasada.
Es también cierto, que a estas alturas, un simple whattsapp confirmando los
malos augurios, es capaz de hacer mucho daño... Qué quedó de aquellas llamadas
para poder comunicarse directamente para transmitir cuales fueran las noticias?
Ojalá en algún momento me permita volver a relacionar ese himno ruso con
sentimientos positivos y grandes recuerdos o momentos vividos; porque ahora
parece un infierno cualquier cosa que nos recuerde la distancia a nuestra
pequeña.
Ahora mismo, la Confianza y la Realidad, parecen reñidas en mi
cabeza; porque es lo que observo en nuestro camino...y no es lo peor que puede
ocurrir; pero absolutamente todo lo que ahora no me atrevo a escribir porque la
sangre hace hervir mis venas, lo plasmaré en algún momento por si puede servir
de ayuda a quienes en algún momento se sientan desesperados por la incredulidad
e incertidumbre y la falta de noticias y soluciones...A pesar de los temores de que hoy no llegasen las noticias, ayer sucumbimos y llegamos a imaginarnos a nuestra hija con algunos de los ropajes y complementos; y no pudimos resistir la tentación de verla vestida con ellos, porque nos hacia sentirla casi nuevamente en nuestros brazos...así es que, cometimos el pecado y lo compramos... Hoy, nos sentimos como si soñar fuera un delito; y por ello, como si al comprar algo con todo nuestro cariño para nuestra pequeña, hubiésemos sido castigados... Aunque no creo que sea así, porque parece (no sólo por nuestro caso, sino por tantas injusticias que observamos...) que Dios se haya tomado una excedencia indefinida.
Esa niña, es nuestra vida...y aunque casi nadie pueda comprenderlo (tengo la certeza de que quienes lo leen, lo comprenden e incluso lo viven o han vivido de algún modo ya en sus propias carnes...), el dolor es infinitamente más profundo cuando se trata de ella y sus necesidades, que cuando únicamente se debe al propio, que tantas veces nos acompaña como consecuencia del camino ya atravesado... Y aunque alguien pueda creer que es fácil de soportar; que a nadie le engañe una sonrisa o un "estoy bien", porque todos sabemos que no es así...pero a pesar de todo, el recuerdo y la fuerza que nos transmiten nuestros pequeños, nos permiten continuar de pie y hacer frente a la adversidad: y llegará el día en que podamos observar esa mochila que hemos ido llenando a nuestras espaldas a base de esfuerzo, porque a pesar de no creerlo, lo habremos ido superando.
Que no os engañe mi sonrisa; el recuerdo de nuestra pequeña, es quien la motiva y quien me permitirá esbozarla y creer diariamente con ese final feliz que parece no llegar nunca. Como muchas otras veces expresé:
A nosotros, ahora sí nos llegaron esos momentos de debilidad; de creer no poder aguantar más...y a pesar de ello, aunque sea con la rodilla hincada en el suelo, seguiremos luchando contra el desánimo y las circunstancias: porque deseamos poder afrontar siempre de igual modo el futuro y los posibles problemas que se le presenten a nuestra pequeña...y queremos que algún día sepa, que nunca hay que rendirse; y que nuestro esfuerzo por estar a su lado, le sirva de ejemplo para conseguir su propia Seguridad y Confianza...
Luis Miguel.
ResponderEliminarEn mi caso en la espera que tambien fue de 4 meses, llegué a coger hasta una pulmonio.
Se que las cosas se somatizan y que escribiendolas como bien haces, es probable que te sirva de valvula de escape.
Unicamente me servia pensar una cosa... y es lo unico que me consolaba.
Mi pareja, mi mujer, ese sol que tambien sufria lo suyo por la llegada de mi hijo y que estaba a mi lado.
Ya llegará el momento de mirar para adelante cuando la niña llegué. Ahora es momento de quereros de verdad y prepararos para cuando sucedan las cosas.
Esa niña aunque la sientas ya tuya, no lo será hasta el juicio (Que sea pronto por Dios), pero lo que si es cierto que TU y TU mujer sois los que os teneis que conservar bien para su llegada.
Un abrazo del papa adoptivo que os sigue todos los dias.
Precisamente, saber que hasta ese día del juicio, no sería nuestra hija, hace de la espera algo más difícil... Tras experimentar esa primera pérdida, los días pesan como losas; y el temor a que el tiempo vuelva a permitirlo, es lo que lo hace aún más duro. Gracias por el ánimo y ese consejo... Sabemos que es fundamental mantener la calma; y gracias a poderlo compartir ambos en todo momento, se hace de algún modo más llevadero, pero aún así, imposible de evitar... El camino ya atravesado, nos hace conocer los peligros; aunque también cómo tratar de sortearlos, pero cada día, los retos parecen distintos y a veces, incluso se nos antojan increíbles...
EliminarLa Fuerza y la energía al final vienen de exteriorizar mutuamente nuestros sentimientos, porque así en todo momento podemos ser capaces de ponerle remedio...y seguir afrontándolo de la mejor manera posible. Como muchas veces digo, no todos los caminos son iguales; ni mejores ni peores, sino que todos son distintos pero complicados de algún modo... Nosotros, sólo podemos mostrar uno de tantos, a pesar de conocer muchos otros tremendamente complicados y enredados por situaciones inverosímiles...
Lo malo y duro de la espera es que la realidad me enseñó, que por mucho que hiciera por mi parte, la solución esta en otras manos de las que no era dueño,
Eliminar.
Luis Miguel, era tremendamente frustrante ver pasar los dias y sin noticias... ya te digo que incluso agarré una neumonia de casi 20 dias en cama... y todo era por los puros nervios... de pensar y desear algo de lo que por mucho que hiciera, no podría solucionar.
Solo puedo trasladarte mi mejores deseos... para que esa niña, tenga la suerte de terminar viniendo a vuestra casa.
Un abrazo de verdad.