Los ánimos de todos, nos generan ilusión; pero realmente y a pesar de llevarlo lo mejor posible, sentimos frustración... Tristeza de no poder transmitir novedades y noticias a quienes nos desean suerte y quienes nos proporcionan esa energía; pero también, la que nos causa ver como siguen pasando las semanas, mientras nuestra hija permanece en la distancia y necesitando cada día más, nuestros cuidados y cariño. No es fácil poder expresar nuestro pesar, porque conocemos y sabemos las circunstancias que rodean los procesos de tantos y tantos amigos, que tampoco encuentran ese fin tan necesario con final feliz... Ha llegado un momento que en ocasiones llego a pensar que me he hecho invisible; pero quizás por no encontrar a veces, y siendo optimista, una forma de comprender aquello que no tiene ninguna lógica...
Sigo siendo positivo, pero hay momentos en que no sé como aún puedo serlo, porque la situación no beneficia a nadie, pero perjudica a todos.
Aunque sea difícil decirlo o pensarlo, debemos creer que si esas noticias no han llegado aún al final de otra semana más, serán la próxima...porque lo único seguro, es que es necesario que ese día llegue: no sólo por nosotros, sino por quien verdaderamente sufre y padece sin poder tan siquiera comprenderlo...nuestra hija. Es duro tener que ver como pasa otro fin de semana con incertidumbre y melancolía, pero no existe otro modo de afrontarlo; porque a pesar de todo, no debemos resignarnos nunca. Todo, por Amor a esa princesa a quien no podemos olvidar en ningún caso; y por quien todo merecerá la pena... No encontramos el día de poder abrazarla de nuevo, pero seguiremos soñando con poderlo ver hecho realidad...
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