Lera es una niña peculiar...

     Este inicio del curso genera, entre otras, una curiosa circunstancia. Como cualquier padre, pensamos siempre que nuestra hija es especial...pero en este caso, tenemos perfecta noción de que por algún motivo, como en tantas y tantas ocasiones, nuestra hija tiene una peculiaridad. Eso si, no se trata de su condición de haber sido adoptada en su momento (y que muchos conocen perfectamente...); sino por el hecho de ser la única de todos ellos que lleva gafitas. Tiene cierta gracia, porque es casual y atrae la atención de los pequeños, pero también de los mayores, provocando que sea perfectamente reconocible por todos. Es un hecho que había pasado desapercibido por nosotros y que pudimos constatar: parece haberles caído en gracia a todos, porque se muestra tal como es, exteriorizando una felicidad inusitada que para nosotros, es realmente lo que hace que sea "peculiar"...y quizás sea por tener la oportunidad de descubrir todo aquello de lo que en su día se vio privada. Gracias, pequeña: por permitirnos sentir y disfrutar a tu lado de lo que la distancia tampoco nos permitió conocer.