Después de alborotar a toda la familia y todos los amigos, ahora es cuando se lo tenemos que transmitir a nuestra familia de la adopción, que la componéis todos vosotros...
YA TENEMOS REGIÓN ASIGNADA!!! Vamos a necesitar algún papel más para poderlo presentar allí y abrir el expediente, pero es un bombazo de sentimientos!!!
Nuestra región es...VLADIVOSTOK!!!...Una maravilla para nosotros y el centro de nuestro pensamiento y nuestros corazones: el lugar que vió nacer a quien pronto, será nuestr@ hij@... a pesar de los 13730 kms que nos separan de éste regalo que desde allí nos llegará: qué es la distancia? Para nosotros, nada...porque está muy, muy dentro de nuestro corazón. Siempre quedará ya marcada en nuestras almas, porque es la cuna de nuestro retoño.
Habrá quien piense que es una locura, pero ni la situación en Corea del Norte (que está muy cerca) nos preocupa lo más mínimo...y todo provocado por el amor a nuestr@ hijo que aún no conocemos; pero que conoceremos muy pronto. Ayer por la tarde, fue el momento de la noticia, pero no fuí capaz de pensar en otra cosa que no fuera recabar información sobre ésta ciudad y ésta región...no era capaz de contener mi emoción y mis ojos y mi corazón lloraban de emoción, de una alegría que no podré olvidar ni expresar, y que ahora, al recordar, me vuelve a embriagar. Si ésta noticia ha sido recibida con éste amor, no puedo imaginar cómo será el momento de presentarnos la fotografía con sus datos y su nombre...
Ahora, ya lo tengo aún más claro: habrá quien no querría ésta zona por la distancia (serán aproximadamente 84.000 kms entre los tres viajes) y la inestabilidad en Corea del Norte, que actualmente es la mayor amenaza en el mundo; pero el destino está ahí, y hace poco, escribía sobre el Tren Transiberiano, soñando con estar allí pronto: otra casualidad más?
Los sueños se hacen realidad si los deseas desde lo más profundo del corazón; y hay que fijarse en las señales que se muestran en el camino, porque ellas te iluminan en el largo trayecto...
Ésta semana, estuvimos en el colegio para informarnos del curso próximo e intentar hacer la matrícula para el año que viene...por si acaso!
Siempre he sido muy positivo desde que iniciamos el proceso, pero esto me ha roto todos los esquemas...ya empezamos a soñar con la felicidad de poder tener pronto un ángel entre nuestros brazos.
Este blog es más personal. Es un Diario: en él, iremos contando lo que es el día a día de nuestra adopción: desde el por qué lo decidimos, pasando por todo el proceso de información, cursos, trámites y todas nuestras emociones, vivencias...Es una historia que no terminará el día que logremos tener a nuestro hijo(-a) en casa, sino que contará también la adaptación y todo lo que venga después...La Historia de una Adopción en Rusia.
Mostrando entradas con la etiqueta región. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta región. Mostrar todas las entradas
sábado, 13 de abril de 2013
miércoles, 27 de marzo de 2013
Semana Santa...de espera.
Hay días positivos, y días en que trato de ver lo positivo. Hay días que parece que no existe motivo, pero acabo el día buscándolo, y aunque no lo encuentre, he mantenido la esperanza hasta el último momento. Hay días que sin motivo, parece que se nos cae el cielo encima: puede ser, porque al no haber ese aspecto positivo ó esa posible noticia que te alegre y te mantenga activo, la cabeza continúa trabajando sola...Ante días como la Semana Santa, en que parece que todo se detiene (es lo que nos pasa a quienes estamos continuamente esperando noticias), no cuentas con esa noticia sorpresa: como si nada bueno pudiera ocurrir.
Sí es cierto que, ante la falta de noticias desde que firmamos, hemos aprovechado para ver a los amigos que, en unos casos están como nosotros en sus respectivos procesos; y en otros casos, nos alegran con su presencia y la de sus pequeños, que nos hacen soñar...
Hay veces que, teniendo a esos niños cerca, te embarga la emoción y a veces incluso, la necesidad ó el deseo íntimo de tener a nuestr@ pequeñ@ cerca, para llenar ese vacío que te queda al volver a casa y seguir, simplemente esperando.
Quizá muchas veces da la impresión de que falta motivación para decidirte por hacer algo distinto, por salir de la espera y darte un respiro necesario; pero todo te recuerda lo mismo...las compras carecen de sentido, porque lo que apetece es ver ropa, pero de niños, y que no puedes imaginar por tratarse de alguien tan cercano, y a su vez tan desconocido. Tampoco puedes pensar en otras necesidades, ya que no se conocen. Aun así, seguimos impulsados a conocer (e incluso a sufrir graves tentaciones de comprar) qué tipo de habitación, carro, cama ó cuna ó incluso ropa, serán necesarios dependiendo de la edad, tamaño y sexo del que se trate...también los juguetes de aprendizaje: tiendas dedicadas exclusivamente a los menores, nos esperan con los brazos abiertos, con sus múltiples opciones. Pero aquí estamos, sin poder dar un paso al frente.
Esperamos unas noticias que, también por nuestra tranquilidad, irán llegando a su debido tiempo: será cuando se abra nuestro expediente en Moscú? ó incluso cuando nos comuniquen la región a la que viaja nuestro expediente?
Lo único seguro es que, cuando en su día tengamos noticias; vendrán todas juntas...en 10 días, habrá cambiado nuestra vida para siempre; y la de un menor que espera sin imaginar ni darse cuenta del cambio que se producirá también en su vida. Recorreremos miles de kilómetros, con una sola ilusión y objetivo: conocer a nuestr@ hij@. Durante esos días, pasará de ser todo desconocido, para ser algo tan claro como el agua, por lo menos, a nuestros ojos: cuando esa incertidumbre llegue en forma de fotografía, y aunque llegue descolorida y con pocos datos, ya seremos capaces de poner en marcha todo el proceso creativo que habrá permanecido latente durante bastante tiempo...el de ir preparando su llegada.
Ante los días en que no parece que lleguen esas buenas noticias, siempre intento inculcar a los demás, que siempre hay una razón para sonreir, pero hay que encontrarla. Hoy, tomaré yo ésta misma recomendación...y seguiré buscando.
Sí es cierto que, ante la falta de noticias desde que firmamos, hemos aprovechado para ver a los amigos que, en unos casos están como nosotros en sus respectivos procesos; y en otros casos, nos alegran con su presencia y la de sus pequeños, que nos hacen soñar...
Hay veces que, teniendo a esos niños cerca, te embarga la emoción y a veces incluso, la necesidad ó el deseo íntimo de tener a nuestr@ pequeñ@ cerca, para llenar ese vacío que te queda al volver a casa y seguir, simplemente esperando.
Quizá muchas veces da la impresión de que falta motivación para decidirte por hacer algo distinto, por salir de la espera y darte un respiro necesario; pero todo te recuerda lo mismo...las compras carecen de sentido, porque lo que apetece es ver ropa, pero de niños, y que no puedes imaginar por tratarse de alguien tan cercano, y a su vez tan desconocido. Tampoco puedes pensar en otras necesidades, ya que no se conocen. Aun así, seguimos impulsados a conocer (e incluso a sufrir graves tentaciones de comprar) qué tipo de habitación, carro, cama ó cuna ó incluso ropa, serán necesarios dependiendo de la edad, tamaño y sexo del que se trate...también los juguetes de aprendizaje: tiendas dedicadas exclusivamente a los menores, nos esperan con los brazos abiertos, con sus múltiples opciones. Pero aquí estamos, sin poder dar un paso al frente.
Esperamos unas noticias que, también por nuestra tranquilidad, irán llegando a su debido tiempo: será cuando se abra nuestro expediente en Moscú? ó incluso cuando nos comuniquen la región a la que viaja nuestro expediente?
Lo único seguro es que, cuando en su día tengamos noticias; vendrán todas juntas...en 10 días, habrá cambiado nuestra vida para siempre; y la de un menor que espera sin imaginar ni darse cuenta del cambio que se producirá también en su vida. Recorreremos miles de kilómetros, con una sola ilusión y objetivo: conocer a nuestr@ hij@. Durante esos días, pasará de ser todo desconocido, para ser algo tan claro como el agua, por lo menos, a nuestros ojos: cuando esa incertidumbre llegue en forma de fotografía, y aunque llegue descolorida y con pocos datos, ya seremos capaces de poner en marcha todo el proceso creativo que habrá permanecido latente durante bastante tiempo...el de ir preparando su llegada.
Ante los días en que no parece que lleguen esas buenas noticias, siempre intento inculcar a los demás, que siempre hay una razón para sonreir, pero hay que encontrarla. Hoy, tomaré yo ésta misma recomendación...y seguiré buscando.
Siempre hay una razón para sonreír. Encuéntrala. |
Suscribirse a:
Entradas (Atom)