Hoy, no se por donde empezar a contarte, porque me dicen que nos relajemos y estemos tranquilos, pero nada ayuda.
Te voy a contar, para irte avisando, lo que te encontrarás cuando al fin estés aquí con nosotros, con tu familia... Es difícil creer, pero vivimos en una sociedad, en la cuál, con la boca grande, todo el mundo habla de solidaridad, ayuda, derechos...y donde todo eso, brilla por su ausencia. La sociedad en la que mamá y yo crecimos, era realmente solidaria y todo el mundo trataba de colaborar y ayudar; empezando por la familia y los vecinos, y siguiendo por los desconocidos; donde las puertas de las casas permanecían abiertas, y donde delinquir, era mal visto y tenía su castigo: y sobre todo, pesaba el conocimiento social, porque los mismos delincuentes, se avergonzaban, al igual que los familiares y amigos.
Ahora, todo eso ha cambiado, y quienes antes eran delincuentes, ahora son héroes... y quienes antes impartían justicia, ahora reparten favores e incongruencia. La sociedad se ha vuelto deshumanizada, y no se puede ni leer el periódico, ni escuchar las noticias, porque te revuelve el estómago. Además, no se habla más que de guerras y de intereses...; y casi nadie se acuerda ya del aspecto humano.
Pero lo peor de todo, es tratar de poner trabas al amor, la bondad y la generosidad; y se incumplen los Derechos básicos, como son los Derechos de la Infancia (aunque tienen hasta un día Mundial, donde los adultos con poder, festejan y se hacen la foto) ó al Trabajo... No se habla tampoco de Obligaciones, con lo cuál, luego no se exigen.
Por estas cosas de mayores, las cuáles sigo sin comprender, se permite que lo peor de la sociedad; las personas que han atemorizado e indignado durante muchos años a la sociedad, pueda pasar las fiestas navideñas en familia, festejando ante la incredulidad de todos; mientras vosotros, nuestros hijos, las pasaréis sin conocer fechas tan sentimentales para todos: seguiréis sin conocer el Portal de Belén, los Reyes Magos, Papá Noel, ó a Ded Moroz...e incluso lo más familiar, como es la Nochebuena, la Navidad ó el Año Nuevo y la Noche de Reyes, por ser los momentos de permitirnos soñar en compañía de los seres queridos, con un siguiente año muy próspero... En éste caso, todos vosotros y con ello todos nosotros, las viviremos en la distancia, sin permitirnos la alegría de esos sueños hasta que por fin, estemos juntos.
No comprenderás, porque ni yo puedo; que para unas cosas, la Justicia sea tan rápida... y para un tema como el de las necesidades de los niños y las familias, en éste caso, las Adopciones en Rusia, los trámites hayan tenido que ser y sean aún, tan lentos y dramáticos.
Me parece increíble, aunque es cierto; que no se haya podido resolver antes este tema, cuando no hay por medio, más que beneficio: el del amor, el de cubrir las necesidades de los menores...el de llenar un vacío en las familias, el de estar dispuestos a compartir el resto de la vida juntos, a pesar de no haber un lazo de sangre, sino uno mucho más poderoso: el del Amor y el Deseo... Como dice una preciosa cita:
"Ni carne de mi carne,
ni huesos de mis huesos, pero aún así,
milagrosamente mío.
Nunca olvides, ni por un minuto,
que no creciste bajo mi corazón,
sino muy dentro de él".
Sigo pensando, que la solución al tema de las adopciones, podría haber llegado antes, si desde los más altos niveles de jerarquía en los Ministerios y el Gobierno, hubiera habido algún compromiso...y más, teniendo en cuenta la predisposición a llegar a un acuerdo y a las buenas relaciones existentes entre ambos países.
Como veía en uno de los preciosos vídeos sobre adopción que hizo nuestra amiga la pasada semana:
"El corazón, no entiende de leyes; y las leyes, no saben qué es el corazón"....
A éstos señores, quienes mandan y rigen los designios e intereses del país, no les ha importado el aspecto humano de muchas de las familias a las que representan...al igual que posiblemente, pasará con las familias inmersas en procesos de adopción en Nigeria, que hace muy pocos días, vieron también sus ilusiones paralizadas... Pero quienes sí se han preocupado, y lo siguen haciendo día a día con su trabajo, son quienes se encargan de la negociación a nivel interno y a nivel ministerial de tenerlo todo preparado para poder proceder cuanto antes a la Firma del Convenio Bilateral de Adopciones con Rusia, porque nos consta; y porque conocen nuestros sentimientos y tienen convencimiento pleno de la necesidad de realizarlo cuanto antes. Y aún así, son quienes soportan nuestra presión y nuestras cartas, aunque también nuestros ruegos: pero nuestra única intención, es contagiar ese convencimiento a quienes deben proceder a tramitarlo cuanto antes. Discúlpennos, pero es lo único que podemos hacer ahora mismo, con unos corazones llenos de amor, pero embargados por la tristeza de la distancia y la incertidumbre.
Desde aquí, les daremos las gracias; al igual que lo harás tú a nuestro lado, cuando consigamos traerte a tu casa...porque ellos, sí hacen lo posible por conseguir la felicidad de tantos niños y familias... ellos, sí tendrán tranquilidad al irse a dormir con la conciencia tranquila, y verán Paz al observar a sus hijos al acostarse; por saber que hacen todo lo posible para que todo esté listo cuanto antes, y que otras familias, podamos cumplir ese sueño de teneros también a nuestro lado...
El otro día, le pedíamos en la carta dirigida a Su Santidad el Papa Francisco, que hiciera todo lo posible por ayudar y concienciar a todas las autoridades y organizaciones mundiales, de la necesidad del cuidado de la Infancia y sus derechos; pero sobre todo, de los niños que existen en desamparo por todo el mundo, independientemente del lugar donde hubieran nacido. Pues bien, sé, porque lo creo fervientemente, que la carta la leyó en persona, al igual que su respuesta...y eso nos hace muy felices, hijo: porque nos hace tener esperanza en que así será...que tú tendrás en nosotros a tu familia para siempre; que te amaremos y trataremos por todos los medios conseguir tu felicidad, pero también, que habrá quien cuide y trate de proteger a todos los niños que en circunstancias nunca deseables, se enfrentan a una vida incierta ante la pasividad y permisividad de ésta misma sociedad mundial, y sobre todo, de sus gobernantes.
Creo, Fernando Denis, que cada vez que el Papa Francisco habla de cuidado y tutela de la infancia (como ha hecho estos días) y la familia; en todo momento, recuerda las plegarias que le hacíamos llegar en forma de mensaje impregnado de amor y esperanza...porque así lo creo con toda el alma...
A pesar de todo, hijo: tendrás la oportunidad de crecer en una familia con valores, que te ayudarán a afrontar la vida...que a pesar de conocer y observar el mal, la codicia y la incomprensión de la sociedad; te permitirá sentir la amabilidad, la bondad y la generosidad...pero sobre todo, te protegeremos, te cuidaremos y te amaremos por encima de cualquier cosa. Te rodearemos de gente como nosotros, que sólo sepan amar y compartir; que sólo traten de ser felices, al igual que nosotros: y de esa gente, ya conocemos mucha, porque además, nos acompañan en éstos momentos en que se necesita, y algunos incluso, nos acompañaron durante toda la vida.
Queremos ser tu mejor ejemplo...y que aprendas lo que es la Confianza, la Esperanza y la Fe; el Optimismo y la Positividad; el Perdón y el Agradecimiento...porque estamos seguros que así, todo te será más fácil para afrontar la vida, a pesar de las adversidades.
Hijo mío...trataremos de conseguir, que tú también seas capaz de sentir la Felicidad; que seas resiliente, y nuestro objetivo será, que consigas, al igual que nosotros, que la sonrisa no abandone nunca tu rostro, y que sea el fiel reflejo de tu corazón...
Te queremos, hijo mío, y no podemos soportar un día más sin tí... pero también por tí, mantendré siempre la sonrisa, aun cuando las lágrimas aparezcan como en éste mismo instante...
A buen seguro que éste osito tan querido por mí en mi niñez, también te permitirá esbozar una sonrisa al igual que a mí...MISHA.
