Bueno, ha sido algo tan imprevisto, pero tan esperado; que lo primero que hemos hecho, es cambiar los planes, y prepararnos para salir volando hacia la Gran Vía madrileña y poder firmar por nuestra Ecai. Nos hemos dirigido hacia allí, y: "sorpresa!", creo que es la primera vez (y que no se enteren los guardias de la zona, aunque con total seguridad, no se repetirá) que Pauli ha pasado de los 100 km/hora: iba todo el camino a 120 km/hora!!! (yo por si acaso, no le he dicho nada, porque estaba encantado!). Y encima, no había tráfico...cuando me he puesto a escribir (después de los mensajes a nuestros seres más queridos, y a los profesionales de la Ecai que nos ayudarán en el resto del proceso de adopción), ya estábamos allí, en Adopciones...y sin haber desayunado! Hoy, mis compañeros del gimnasio, no han tenido mi compañía, pero merecía la pena y, también han recibido la noticia por mi cuñado Alberto.
Bueno, le he contado a Pauli mientras iba conduciendo, que pensaba comentar la velocidad a la que conducía y...me ha respondido: -"si me han puesto una multa, la vas a pagar tú...pero los puntos, me los quitarán a mí!". Hoy, eso era lo de menos...
Ahora, será momento de cumplir con nuestro plan, e ir a cenar a un restaurante ruso para celebrar el CI...posiblemente "El Cosaco", el más antiguo de Madrid. Aunque nos han dicho unos amigos (ayer mismo), que es más turístico: iremos un jueves, que hay actuación en directo...aunque visitaremos alguno más en el futuro.
Saber que ya has cumplido con otro de los trámites del proceso, es algo difícil de explicar; y más si se trata del tan temido CI; que en realidad lo es, porque es el resultado de todo lo vivido hasta ahora, desde que empezamos el proceso.
Deseo a todos los que están esperando éste certificado, que lo disfruten y lo sientan tan profundamente como lo estamos sintiendo nosotros, porque éste documento, es lo necesario para poder sentir ya más cerca a nuestros futuros hijos...de hecho, el expediente viajará en los próximos días al destino: en nuestro caso, a Rusia.
Anoche, nos acostamos después de ver documentales sobre el Tren Transiberiano, su creación y lugares por los que transita...algo tremendo y un viaje que ya está en nuestros planes de futuro, para conocer la Taiga, la Tundra, el corazón de Siberia, el majestuoso e imponente Lago Baikal, Irkutsk, Yaroslavl, y por supuesto, el punto final: Vladivostok, ya en el Pacífico...
Siempre había pensado en cómo recibiría la buena noticia, y por ello miraba el buzón hasta de noche, cuando volvía a casa y sabía que era imposible que hubiera pasado el cartero...pensaba que sería al abrir el buzón, y que correría a ver a Pauli al despacho para enseñárselo y no decírselo por teléfono, pero...las noticias buenas, si llegan antes de lo esperado; el medio es lo de menos.
Qué decir que, ya hemos enviado lo necesario para firmar con nuestra Ecai (AIST) lo antes posible; y algo muy importante, no hay lista de espera en la actualidad, con lo cuál, nuestro expediente de adopción viajará muy pronto a nuestro esperado destino, donde nos espera nuestr@ querid@ y desead@ hij@: Rusia...
