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jueves, 20 de junio de 2013

Pensando en la despedida...y en el reencuentro: crónica del jueves.

Hoy, la mañana ha sido generosa con nosotros otra vez...amenazaba lluvia y se ha contenido hasta que ha llegado la hora de despedirnos de él...
El día, nos ha regalado unos ratos fantásticos de risas, carreras y fotografías para el recuerdo y fundamentales para la espera. 
Cuando llegamos, estaban ya en el patio, jugando con los juguetes y los columpios...y al vernos, se acercó a saludarnos! Y empezó a sonreír...esperando nuestra llegada. 
Este niño, ya ha aprendido estos días, lo que es el amor incondicional y sincero y estamos seguros de que por eso, nos recordará cuando volvamos...
Si el sueño de conocerlo era grande, el de volver...significará volver a respirar, a recuperar ese aliento que seguro que sentiremos que nos falta hasta entonces.
Pero, puedo pensar en la despedida de mañana: la "sala de música", vendrá con nosotros en la mochila (porque seguro estoy, que lloraremos más de lo que el lo hizo delante de la TS), pero a él, le dejaremos los corazones aquí, en Vladivostok: para que nos los cuide hasta la vuelta y para que lo puedan acompañar todos los días...
Tranquilos y seguros nos vamos porque sabemos que en ningún sitio (que no sea con nosotros), podría estar mejor ahora mismo que aquí, que han sido sus únicos seres queridos  hasta nuestra llegada, y con quienes ha compartido su corta hasta ahora vida; donde le han dado cariño desde que llegó...y sabemos que es así, porque lo hemos vivido.
Cuando alguien puede hacerte ver este mundo roto, como hermoso...nunca deberías dejarlo ir.


miércoles, 19 de junio de 2013

Un día infernal...puede acabar con la luz del atardecer

Hoy, el día puede haber terminado pronto...o no. Es un día extraño y marcado por un disgusto muy grande que posiblemente no tenga importancia, pero que te hace pasar un rato de un amargor y dolor tan fuerte, que notas venirte abajo: porque en tu cabeza, todos los sueños se derrumban...
Creo que nuestra experiencia de hoy, puede servir para dos cosas: para pensar que hay que ser fuertes y estar siempre preparados; y para que los que se enfrenten a esta situación en el futuro, sepan que no es el fin del mundo...
Bien: hoy era el día que la Trabajadora Social del Departamento de Educación, nos visitaba en la casa cuna y veía nuestra relación con Fernando...y el día no era el apropiado por la intensa lluvia que caía: tendríamos que reunirnos en la sala de música, de no muy grato recuerdo por sus lloros del primer día. En efecto, el mal augurio se ha producido: ha entrado en la sala y se ha puesto a llorar, cosa que ha continuado haciendo mientras la TS estaba en la sala...salvo un par de minutos (en total), El Niño no ha dejado de llorar desconsoladamente... Nosotros rezábamos en voz baja y suplicábamos porque eso terminase en cualquier momento, pero no ha sido así; nos temíamos ya lo peor, y además, intentando sonreír y manteniendo el tipo, haciendo de la situación, algo normal; mientras veíamos el mundo derrumbarse!
Pues bien, a pesar de llover, hemos salido al patio y hemos estado de paseo (que es lo que más le gusta y relaja)...y donde está como pez en el agua: justo en ese momento, se marchaba la TS!!! No he llorado por lo que pudiera pasar, casi de milagro; pero por dentro, moría de desazón...y lo peor de todo: estábamos tan compungidos, que no podíamos articular palabra para preguntar al representante! Al despedirnos, La directora de la casa cuna le ha dicho a nuestro peque, que nos abrazase: y él, lo ha hecho con normalidad...ahí, se me ha vuelto a hinchar el corazón, de alegría por lo que representa, y de tristeza por lo que podía ocasionar el espectáculo anterior... Hemos vuelto al coche para volver al Hotel, y no sabíamos qué hacer! Y al ponernos en marcha, nos ha comunicado el representante, que la TS del Dep. de Educación, había hecho un informe favorable! La valoración, no sólo la hizo sobre lo más evidente que eran los sollozos del pequeño, sino sobre los intentos que hicimos para calmarlo y la tranquilidad al intentarlo; ya que, es muy normal que un niño, se sienta extraño con personas que le muestran algo distinto a lo que tienen...y que incluso esa reacción es buena, porque significa que piensa correctamente, que eso no es lo habitual, con lo cual, no debe ser bueno. Al principio, al oír la explicación, no he podido contener las lágrimas, aún sin creerlo; pero poco a poco, y tras un paseo, nos hemos relajado e incluso, hemos podido comer. 
Como muchas veces dicen: "Dios aprieta pero no ahoga"...y ahora, ha salido el sol; así es que, si todo va bien, podremos visitarlo en un momento ya que nos recomendaron (por nuestra salud) no ir por la tarde si llovía...porque habría que volver a la dichosa "sala de música"...
Esperamos disfrutar esta tarde, porque la moral ha vuelto a donde solía, pero estos golpes y su desconocimiento, hacen que sean más duros de lo normal...así que, os puede servir de aviso a los que os enfrentéis a esta situación: nunca perdáis la esperanza y los nervios, porque si se hace lo correcto, no se puede uno equivocar...y si en ese momento, vuestro hijo llora, tomadlo con normalidad y con temple, porque no tiene por qué ser un problema...
Sigue el rayo de luz sobre Vladivostok! Iluminando nuestro camino y esperamos de corazón, que los vuestros también! Un abrazo!!!

Unas horas más tarde, y ya de vuelta al hotel...

Muchas gracias familia: al final, salió el sol y pudimos ir a verlo por la tarde...
Fué fantástico otra vez, pero claro: al aire libre! El rato ha sido fantástico y las fotos magníficas! El representante hizo muy buen trabajo (es una persona amable y muy profesional), porque nos dio muchos ánimos y nos hizo comprender (eso sí, en inglés, porque la traductora ya no estaba) , y ya en el coche; nuestro buen hacer y la normalidad de la situación y lo bueno de ella, porque expresa el buen estado de su mente...
También, me ha dado por pensar que quizás, allí lo habría visitado alguien más...y no hubiera sido una buena experiencia para él. 
Finalmente, podemos descansar tranquilos: bueno, de hecho, al llegar al hotel...nos sentamos en la cama y nos hemos despertado tres horas más tarde!!!  Mañana: visita al Notario para aceptar, porque no podía ser de otra manera, a nuestro hijo... Siempre lo he dicho y después de conocer su historia, lo tenemos más claro; que el destino quería que nos encontráramos y por eso, ha tenido que ser muy rápido.
Y como dice una amiga con su corazón también en Vladivostok: tanto he hablado de la resiliencia; y hoy hemos dado un ejemplo de ella, de la manera de afrontar y superar las adversidades para salir fortalecido de ellas...
Me iré a descansar, pensando en..."la dichosa sala de música"...


Cuando llueve, busca arcoiris; cuando oscurece, busca las estrellas...