miércoles, 27 de julio de 2016

Las celebraciones por el cuarto cumpleaños de Lera...

     Este viernes, Lera cumple 4 años: y las celebraciones, comenzaron ya al iniciar la semana. Tras un año repleto de cumpleaños; Lera es la protagonista...y a buen seguro que lo siente: llegó su momento. Este año, es más consciente de lo que significa esta celebración; puesto que debido a su carácter simpático y extrovertido, ha acudido a innumerables fiestas...y a pesar de ser fechas difíciles para reunir a los amigos, hemos tratado de hacerlo: ha resultado un completo éxito, porque a pesar de las significativas ausencias, ha sentido el cariño de todos...y eso es fundamental para ella; pero también, tremendamente gratificante para nosotros poder sentir su felicidad e ilusión. Ha sentido el cariño de amigos y familiares; amigos del cole...pero también siente muy cercanos a aquellos que sabe la quieren y no han podido estar a su lado en estas celebraciones: habrá muchas otras, para poder seguir uniéndonos y compartir momentos agradables, sin duda. 
     Ayer martes, aprovechando el día de descanso en el restaurante, preparamos en casa una fiesta de cumpleaños para Lera, invitando a esos familiares y amigos más cercanos (obviamente, dificultoso para los que viven en la lejanía; pero para quienes cualquier encuentro, es también motivo de celebración); que tuvieron que hacer un esfuerzo para acudir en un día tan poco propicio, entre vacaciones y calurosas jornadas de trabajo. Aún así, conseguimos tener una amplia representación, que permitieron a Lera disfrutar una jornada inolvidable... El único inconveniente (frecuente en algún momento en todos los niños), es su "interés" por los regalos, ya que parece haberse acostumbrado a ellos; y dejado de un lado la importancia y el sentido de estos... Ya que ha pasado a no apreciarlos tanto como hacía a su llegada a casa. Es lógico recibir regalos, pero hace sentir que quizás, sean demasiados y reste el valor emocional y personal de estos...aunque sí es cierto e importante contar, que todos y cada uno de los regalos o detalles, los reconoce e identifica perfectamente al mostrarlos, con quien en algún momento, se los ha regalado. Al menos eso, nos muestra que quizás el único problema sea la falta de tiempo para poder jugar con ellos, o para descubrir la enseñanza que pueda derivar o llegar implícita en cada uno de ellos.
     Fue una jornada marcada para nosotros también, por la oportunidad que nos ofrece para reunirnos junto a personas a quienes nos unen muchos lazos; a pesar de no encontrar tiempo que compartir. Disfrutamos de la compañía, de la merienda y de un bañito en la piscina...aunque sólo algunos mayores (que somos como niños), aprovechamos la excusa de estos, para bañarnos con ellos. Lo más agradable fue sin dudas, el calor humano y poder apreciar el reflejo de esos momentos de felicidad en el rostro de Lera...que por supuesto, no tienen precio ni nada con qué compararlo.

     Los globos, no faltaron en la celebración: y al inflarlos y juntarlos formando (adrede) la bandera de Rusia, no podíamos dejar de recordar, tanto el camino hasta la llegada de nuestra hija a casa, como el de todos aquellos que continúan su particular odisea para conseguirlo: y únicamente podemos ofrecer ánimo y todo nuestro aliento para ver cómo llega ese momento. Ver esos globos hinchados, nos evocaba el recuerdo de tantas familias unidas por un bien común para todas ellas y para todos aquellos pequeños a quienes esperábamos...y muchos más. Recordábamos aquellas concentraciones  en que los globos lanzados al cielo (por toda España y diversos puntos alrededor del mundo), transmitían y transportaban el amor incondicional de las familias, por unos hijos, algunos ya conocidos y muchos de ellos aún sin haber podido poner rostro, a quienes deseaban y ansiaban tener a su lado. No podíamos por menos que recordar a todas aquellas familias unidas y a aquellas que aún continúan tratando de hacerlo...una de ellas muy especial, y ausente por este motivo (y las consecuencias de esos momentos duros que acompañan el proceso de adopción) y por primera vez, en una celebración de Lera. Eso sí, los Globos seguirán enviándose llenos de Amor para Rusia...para seguir haciéndonos soñar con esos encuentros de las familias con sus hijos.
     Esta reunión, finalizó a horas poco habituales para nosotros, pero aún más para Lera...aunque hoy continuaban las celebraciones: era la ocasión de celebrarlo con sus amigos y compañeros del cole! 
     La celebración con sus compis, ha sido en un complejo con las características piscinas de bolas, toboganes y camas elásticas, acompañadas con la habitual merienda, tarta de cumpleaños y pintada de rostros...aunque en esta ocasión, con un paseo en un circuito de motos y coches de carreras. En algún caso, como el de Lera y debido a su escasa experiencia al mando de estos vehículos, los peques han ido acompañados de los padres: aunque es la excusa perfecta para algunos, de disfrutar como enanos junto a ellos (y motivo suficiente para repetir). 
     Tras muchas fiestas de cumpleaños en que Lera disfrutaba como invitada, junto a todos los niños de su edad y con quienes comparte la mayor parte del tiempo; llegó hoy el momento de sentirse centro de atención...y aunque era evidentemente algo nuevo para ella, fue realmente maravilloso poderlo observar como adultos; pero aún más como padres de este regalo de Dios y de la vida. Estaba tremendamente emocionada simplemente de verse junto a sus amigos, sentada en el "trono" reservado a los príncipes y princesas...como lo fue evidentemente el soplar las velas, compartiendo el "Feliz Cumpleaños", que le dedicaban todos. Tras el correspondiente tiempo dedicado a bailar; ver con qué ilusión y alegría abría los regalos, es algo muy gratificante y emocionante...y aunque en algún momento parecía incluso no poder ser real tanta emoción (puesto que ha tenido ocasión ya de abrir afortunadamente muchos), no podíamos dejar de imaginar que en esta ocasión, también se trataba de una de esas maravillosas "primeras veces", de la que nuevamente éramos también nosotros testigos. Gracias hija mía, por permitirnos sentir tantas emociones...y por ser tan afortunados de poderte acompañar en esta vida; ya que por mucho que hubiéramos imaginado, de ningún modo habría sido comparable con estar junto a ti. 

     Han sido un par de jornadas de tremenda felicidad y eterna y enorme gratitud a todos quienes lo han hecho posible...y quienes aportan su granito (o puñado) de arena para conseguir que Lera sea, cada día más, una niña Feliz...y agradecida por tanto cariño recibido; al igual que nosotros. Aunque muchos de ellos nunca lo leerán o quizás nunca recibirán este sincero agradecimiento: Gracias a todos, porque la aventura continúa...pero entre todos, lo hacéis más fácil. Hay sentimientos que de ningún modo podría expresar; pero muchos no podríais comprender hasta qué punto cualquier detalle, nos permite marcaros en nuestro recuerdo para siempre: y eso es gracias indudablemente al Amor que sentimos por nuestra hija... 

     La llegada de este cuarto cumpleaños (segundo ya como familia), era un momento esperado; pero la celebración del viernes, será muy íntima y dedicada a disfrutar juntos de un día muy especial para nosotros. 

2 comentarios:

  1. Muchas felicidades para Lera y para vosotros.

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    1. Muchas gracias...conoces afortunadamente de qué hablamos y sabes lo especial que es cada día y cada celebración. Un abrazo muy fuerte y disfrutad las vacaciones al máximo. Un beso y un abrazo fuerte para vuestra peque y para vosotros...

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