viernes, 21 de febrero de 2014

Quizás seamos unos soñadores...

     Quizás, seamos unos soñadores... Hoy, amanecía con una Ilusión que nos recorría el cuerpo: la del recuerdo de las niñas que también nos conquistaron el corazón en nuestra fantástica y maravillosa semana en Vladivostok... esas niñas a las que seguía recordando en los sueños durante éstos meses: su alegría nos marcó para siempre, porque no podíamos creer que esos ángeles, (al igual que cualquiera de los otros niños de allí) estuvieran sin una familia... y ello, nos hace recordar y reflexionar, que por muy injusta que parezca la vida, siempre hay quien podría tener más motivo para quejarse. No es justo que existan tantas trabas para que unos y otros puedan ver realizado, no un sueño, sino una Necesidad...
     Fuímos ingenuos por pensar que quizás alguna de esas niñas, fuera la que teníamos que conocer en ese viaje para tras nuestra pérdida, acudir en su busca... pero no será así: afortunadamente para ellas, ya no necesitarán una familia, porque ya hay quienes las esperan como nosotros esperábamos a nuestro pequeño...
     Somos ilusos, pero seguiremos soñando: porque esa opción, nos hizo tener toda ésta semana, una ilusión increíble e impensable unos días atrás... Será quien tenga que ser, pero es cierto, que hay días en que parece que todo se vuelve a derrumbar y que te vuelve a atrapar... como si volviese nuestro particular tsunami; y lo volviese a arrasar todo a su paso.
     Hoy, también recibimos la comunicación oficial del Departamento de Educación de la Región de Primorskiy (Vladivostok), en la que dan por finalizada nuestra asignación, puesto que nuestro Denis, ya está en su nueva familia tras hacerse firme la sentencia.
     Un día difícil, porque aún sabiendo con certeza que era así, cada día despertamos pensando que es un mal sueño: una pesadilla que revivimos día a día...
     Hijo mío: se feliz y que al menos, sea para siempre... Rezaremos y pediremos por tí, no lo dudes.
     Tras una semana de ilusión, volvemos otra vez a poner los pies en el suelo y esperar... Qué nos tendrá preparado el Destino? y... cuando? Esas son otra vez las dudas; pero ahora, lo esperaremos con el amargor por lo que hemos tenido que aprender a base de dolor...
     La tristeza acabará, pero a qué precio? En éstos momentos, es difícil separar la tristeza de la ilusión por conocer a nuestr@ próxim@ hij@...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Déjanos aquí tu comentario, que será publicado con todo nuestro agradecimiento. Esperamos ser de ayuda.