Hasta luego, Santillana...la próxima vez, seremos tres!!!

     Nuestra visita a Santillana, llega a su fin... Han sido únicamente 3 días, pero tremendamente reconfortantes. Nos han hecho superar unos momentos difíciles, además de darnos una inyección extra de moral y ánimo para afrontar el resto de la espera con el optimismo que nos caracteriza. Lo veo importante, porque siempre, los malos momentos, deben servir para hacernos fuertes y poder enfrentarnos al futuro con mucha más energía. Parece mentira:  esta tierra nos ha dado siempre energía; pero esta vez, nos ha ayudado a recuperar la alegría, la ilusión y el humor, que la ansiedad, las dudas y los problemas, nos habían hecho casi olvidar...

     Ahora, nos toca visitar Burgos: la tierra del Cid, Don Rodrigo Díaz de Vivar... Dejamos una parte de la familia, para reencontrarnos con otra. Estar con seres queridos, siempre reconforta; y en eso, sí es verdad que somos muy afortunados. Seguiremos buscando motivos para hacer de la espera, algo un poco más llevadero. Y seguiremos también pidiendo, que las noticias que esperamos (la fecha del juicio), lleguen pronto. 

     La jornada por San Vicente de la Barquera y Ontaneda (donde además de los sobaos pasiegos, se puede disfrutar de mis helados favoritos en la Heladería López: de queso, mantecado o miel con orujo, entre otros), ha sido fantástica acompañados por mis cuñados y mi sobrino. Echaremos de menos también, las veladas en Santillana; pero la próxima vez, si todo va bien...ya seremos tres!!!